Estos días de Semana Santa,
por el confinamiento y el estado de alarma,
se han suspendido todas las procesiones
a lo largo y ancho del país.
Me atrevería a decir
que desde que existen estas tradiciones (siglo XVI),
jamás se habían suspendido,
incluso durante la Guerra Civil (1936-1939)
se siguieron celebrando.
Os dejo un recuerdo del año pasado.
¡¡¡Cuidaros y muchos ánimos!!!
El arraigo de la religión en este y otros países es tan fuerte que no resultaría fácil suspender este tipo de manifestaciones.
ResponderEliminarYo no soy creyente pero, entiendo que para aquellos que sí lo son esta suspensión debe representar algo duro y difícil de superar.
Un abrazo y a cuidarse mucho.
Pues ahora que lo dices, no conozco el dato pero probablemente sea así. Lo que no han conseguido situaciones muy estrepitosas, lo ha conseguido un "bicho" microscópico.
ResponderEliminarMe gusta la visión distorsionada que nos ofreces con esta fotografía. Muy real.
Un fuerte abrazo.
Ya nada es como era ... y mas que cambiará.
ResponderEliminarUn abrazo y cuidate
Semana Santa vista a través del espejo. Aunque este año ni siquiera eso. Una buena y original instantánea callejera que casi nos permite oir el redoble de los tambores.
ResponderEliminarCuidense mucho
increíble si... todo nos hace pensar en estos tiempos... saludos
ResponderEliminarVivo en una parte de España, en el que está muy arraigada las procesiones y todo el mundo sale esos días a la calle y ni que decir la afluencia que hay de turistas. Yo también he hecho una publicación, tomando imágenes de Semana Santa, de otros años.
ResponderEliminarBesos
El espejo ... Buena imagen Enrique.Cuìdate
ResponderEliminarCon ganas de que todo vuelva a la normalidad.
ResponderEliminarUn abrazo, Enrique.