Ahí situado, estratégicamente, el cenicero es como una invitación, como una llamada al vicio. Yo también paso, pero la foto es una pasada. Un fuerte abrazo, Enrique.
Parece un lugar aséptico e inofensivo, pero el tabaco no es ni una cosa ni la otra. Extraordinarias la clave alta, el minimalismo y la composición. Un fuerte abrazo Enrique
Has creado un ambiente muy adecuado para este bodegón minimalista, parece como si el cenicero estuviera inmerso y flotase sobre volutas de humo. Un abrazo,
Entre blancos anda el juego !!! Me gusta y mejor que el cenicero no sea para ti... 'el fumar mata' ... fumé durante muchos años y hace mucho que lo dejé
Muy buen detalle en el que se fijó. Hasta parece mimetizarse con el fondo... tal vez porque así se sienten últimamente los fumadores, cada vez más apartados (al menos por aquí)
Como se puede mostrar tanto con tan poco, un único color, 3 formas que se intuyen, un volumen, cierta textura en la pared, una raya a media altura. Buenísima también.
Beautiful idea.
ResponderEliminarThank you, Robert.
EliminarAhí situado, estratégicamente, el cenicero es como una invitación, como una llamada al vicio. Yo también paso, pero la foto es una pasada.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Enrique.
Muchas gracias, Carlos, efectivamente parece una invitación a fumar, aunque yo solo veía formas, paso del vicio, jeje.
EliminarUn abrazo.
Parece un lugar aséptico e inofensivo, pero el tabaco no es ni una cosa ni la otra.
ResponderEliminarExtraordinarias la clave alta, el minimalismo y la composición.
Un fuerte abrazo Enrique
Muchas gracias, Josep, me gusta tu análisis.
EliminarUn abrazo.
Has creado un ambiente muy adecuado para este bodegón minimalista, parece como si el cenicero estuviera inmerso y flotase sobre volutas de humo.
ResponderEliminarUn abrazo,
Muchas gracias, Miguel, entre tanto blanco y gris, todo parece estar en el aire.
EliminarUn abrazo.
Entre blancos anda el juego !!!
ResponderEliminarMe gusta y mejor que el cenicero no sea para ti... 'el fumar mata' ...
fumé durante muchos años y hace mucho que lo dejé
Abrazos
Estos tonos me encantan y en cuanto vi el rinconcito, no lo dudé.
EliminarYo también lo dejé hace años, Esme.
Besos.
Simplemente blancos y grises pero, impresionantes. Un abrazo
ResponderEliminarSabía que te iba a gustar, jeje.
EliminarAbrazo.
Interesting.
EliminarUna foto muy bien ambientada, Enrique, bien vistas esas lineas y formas y estupenda la clave alta.
ResponderEliminarSaludos.
Muy blanca! Como el humo que desprende un cigarrillo. Pero me gusta!
ResponderEliminarUn abrazo y buen fin de semana, Enrique.
Muy buen detalle en el que se fijó. Hasta parece mimetizarse con el fondo... tal vez porque así se sienten últimamente los fumadores, cada vez más apartados (al menos por aquí)
ResponderEliminarAbrazos!
Buena foto, Enrique. Composición y edición impecables.
ResponderEliminarAgustín
Hace mas de cuatro años que lo dejè y estoy divinamente.. Buena foto ;-)
ResponderEliminarBuen trabajo este que nos presentas. Que sea para otros, amigo... Para otros...
ResponderEliminarBueno, bueno, que imagen minimalista tan bonita, me parece una especie de bodegon minimalista como ya te han dicho,saludos y feliz semana.
ResponderEliminarYo tampodo fumo, pero hay que respetar el gusto de los demás. El cenicero no debe faltar, para que no acaben tirando las colillas al suelo.
ResponderEliminarBuen trabajo has hecho en esta entrada. Hoy me estoy poniendo al día de lo atrasado. No está el tiempo, para salir a la calle.
Besos
Como se puede mostrar tanto con tan poco, un único color, 3 formas que se intuyen, un volumen, cierta textura en la pared, una raya a media altura. Buenísima también.
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